Muy cerca,
frente a mí,
donde se hacen cálidos los sueños
a pesar de su frialdad palpable,
en el océano misterioso del silencio,
simplemente observo
para intentar renovar
el color “casi inalterable”
de las ilusiones.
Quizás sea aquí,
en este preciso instante,
donde los pensamientos
vuelen con alas de plata
y no existan piedras
que los traspasen,
ni hieran, con ello,
estos ojos que miran al mundo
tras la sonrisa muda
de un cristal.
Mari Ángeles Castillo
Publicado en el nº 1
de la "Colección Variaciones"
17 de Mayo de 2004
sábado, 20 de octubre de 2007
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