Altivo entre humanos
velas antiguas voces gimientes.
Egoísta te yergues y ocultas
firme en la tierra que no ves.
Sangras los ojos, alzados a lo eterno;
estrechas tus dedos y punzas el aire,
lo acaricias.
Pincel o lanza,
agujereas el cielo y lo estrellas.
Reloj de sol
que tan quieto perturbas a la madre.
La luz de tu sombra, anhelo;
la luz y tu sombra.
Ana García
Poema publicado en el nº 10
de la Colección "Variaciones"
16 de Febrero de 2007
miércoles, 18 de julio de 2007
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