el tiempo, con sus latidos,
sueño que soñando inventa
un amor dulce y ficticio.
Tiempo revuelto de horas
y que a golpe de segundo,
mide un amor que no vale,
un amor acaso absurdo.
Canción última que duerme
arrullada entre miradas,
que en desazón languidece
y sufre desesperada.
Ola que a una playa arriba,
alegre y esperanzada
pero después que la besa,
por la playa es rechazada.
Calor que a fuerza de frío,
se enfría y quizás se apaga
para, al menor movimiento,
de nuevo avivar su llama.
Poema que como un eco
se extiende sobre la calma,
hasta revolver el tiempo
y abandonar la esperanza.
Último estertor sonoro
de un amor que, agonizante,
canta su aflicción al mundo
y cuenta su muerte al aire.
Rocío Virginia Martínez
Poema publicado en el nº 4
de la Coleccíon "Variaciones"
30 de Marzo de 2005
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